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Una obra temprana de Goya sale a subasta en Madrid

Una obra temprana de Goya sale a subasta en Madrid
Una obra temprana de Goya sale a subasta en Madrid
El próximo 23 de junio de 2022, Alcalá Subastas ofrecerá “Aparición de la Virgen del Pilar al Apóstol Santiago y sus discípulos”, pintada hacia 1775 por Francisco de Goya.
Por G. Fernández · theartwolf.com · Imagen:  Francisco de Goya, “Aparición de la Virgen del Pilar al Apóstol Santiago y sus discípulos”, c.1775
La pintura, un óleo sobre lienzo de 107 × 80 cm, sale a subasta con un precio de salida de dos millones de euros, lo que no parece exagerado para un lienzo de tamaño considerable, buen estado de conservación, y atribución bastante segura, del que fue sin duda el pintor más importante de su tiempo.
No obstante, la obra es inexportable, lo que eliminará el interés de compradores extranjeros, limitando -quizás decisivamente- el número de coleccionistas e instituciones que podrían pujar por la pintura. A finales de 2019, la casa de subastas Ansorena sacó a subasta un “San Ignacio de Loyola” de Goya con un precio de salida de unos 600.000 euros, pero la obra (también inexportable) no encontró comprador al no alcanzarse en precio mínimo.
Según Alcalá Subastas, la obra fue pintada hacia 1775, un año fundamental en la formación del pintor, ya que fue el momento en el que se trasladó a Madrid para pintar los cartones que después se transformarían en los tapices para la Real Fábrica, con ejemplos tan famosos como “La Cometa” (1778) o “El cacharrero” (1779). Esta datación resulta algo confusa. La casa de subastas indica que “el tema de la Virgen del Pilar fue elegido por Goya en distintas ocasiones. Se conoce un dibujo a lápiz de una de las páginas del Cuaderno italiano (f.134r) y un pequeño lienzo, 56 x 42 cm, que pintó h. 1771-1775, conservado en el Museo de Zaragoza.” No obstante, por temática y tamaño, la pintura es inmediatamente relacionable con “La Aparición de la Virgen del Pilar” conservada en el Museo Nacional de Arte de Cataluña, y que el museo data entre 1775 y 1785, lo que coincidiría con la breve y decepcionante estancia del pintor en Zaragoza, en la que esperaba conseguir un importante encargo para la decoración pictórica de la basílica de Nuestra Señora del Pilar.
Alcalá Subastas destaca también “el buen estado de conservación de la obra cuyas labores se llevaron a cabo en el taller de Restauración del Museo del Prado, justo antes de la exposición en la que estuvo en el Palacio Real de Madrid.”

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