En el contexto de las actuales protestas en Chile y la represión con la
que el gobierno de Sebastián Piñera reacciona a ellas, el número de
casos denunciados de violencia político-sexual también ha aumentado
enormemente: El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) ha
registrado 197 casos de violencia sexual en las comisarías en los cuatro
meses transcurridos desde el inicio de las protestas. Las
organizaciones y activistxs feministas trabajan
para hacer visible esta forma de violencia, luchan contra la impunidad y
para que la violencia político-sexual se codifique como un delito
específico de género en el derecho penal. Lateinamerika Nachrichten habló con Sandra Palestro, socióloga, activista feminista y desde 10 años forma parte de la
Coordinación Nacional de la Red Chilena contra la Violencia hacia las
Mujeres.
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